Hola, Bearlivers
Creo que hoy os voy a contar sobre el primer chiste que vuestro columnista favorito contó frente a un público.
Con mi característica intelectualidad y conciencia social conté una graciosa historia. Era una genial crítica al machismo y la inacción policial, con cierto toque de animalismo.
Cuando vi que nadie se reía procedí a explicarlo: “La gracia está en que el policía confunde el nombre del perro con…”
No pude ni terminar la frase cuando surgió una turba enfurecida enarbolando bates de béisbol y los cuchillos. Por suerte, una valiente señora intervino.
-¡Parad! ¿Acaso no veis que tiene retraso mental?
Con esas palabras la señora calmó a los asaltantes. Creo que debo la vida.
Y hoy le dedico este post, para que sepa que sigo agradecido.
Gracias, mamá.
te entiendo perfectamente en mi etapa Gay ponía que pollas y no me gusta señalar pero corriendo salía Rotor y Bonox a comentar y algún sarasa más . No me los quiero imaginar en un quedada la de pollas que se comerían, pero es un suponer. El quE borra sí que es maricón..........